Leónidas Andréiev.
Rusia: 1,871-†1,919. “…fue un escritor y dramaturgo ruso que lideró el movimiento
del Expresionismo en la literatura
de su país. Estuvo activo en la época entre la Revolución de 1905 y la
Revolución de Octubre de 1,917 que finalmente destronó al gobierno zarista. Idealista y
rebelde, Andréiev pasó sus últimos años en la pobreza, y su muerte prematura por
una enfermedad cardíaca… A diferencia de su amigo Máximo Gorki, Andréiev no
consiguió adaptarse al nuevo orden político. Desde su casa en
Finlandia, donde
se exilió, dirigió al mundo manifiestos contrarios a los excesos bolcheviques.” Fuente: es.wikipedia.org Foto: ciudadseva.com
[Andréiev, al igual que
muchos otros buenos escritores del primer tercio del siglo pasado, hoy es
desconocido para la mayoría del público lector. Como José Ingenieros, Jack
London o André Malraux, fue un profundo conocedor y gran narrador del Hombre y
sus sentimientos en los diversos estados de su vida. Este cuento muestra, con
fina ironía, cuando ignoran lo que les ha ocurrido.]
Ben Tovit.
El día terrible en que se realizó la
mayor injusticia del mundo, en que se crucificó en el Gólgota, entre dos
bandidos, a Cristo, ese mismo día, el comerciante de Jerusalén Ben-Tovit tenía,
desde por la mañana, un dolor horrible de muelas.
Le había comenzado la víspera, al
anochecer. Ben-Tovit experimentó en el lado derecho de la mandíbula, en la muela
contigua a la del juicio, una sensación singular, como si se le hubiera
elevado un poco sobre las otras; cuando la rozaba con la lengua, sentía un
ligero dolor. Pero después de comer, la molestia pasó, Ben-Tovit la olvidó y
acabó de tranquilizarse con el cambio de su viejo asno por otro joven y
vigoroso, negocio que le puso de buen humor.
Durmió con un sueño profundo; pero,
al amanecer, algo vino a turbarlo. Se
diría que alguien llamaba a Ben-Tovit para algún grave asunto. No
pudiendo ya resistir aquella inquietud, se despertó y se dio cuenta al punto de
que tenía dolor de muelas. Entonces era un dolor franco y claro, muy
violento, un dolor agudo e insoportable. Y no se podía ya comprender si lo
que le dolía era la muela de la tarde anterior o las demás contiguas a ella.
Toda la boca y toda la cabeza le dolían, como si estuviese mascando millares
de clavos ardientes. Se enjuagó la boca con un poco de agua del cántaro;
durante unos momentos el dolor se aplacó, y Ben-Tovit experimentó una ligera
tirantez en las muelas. Dicha sensación, comparada con el dolor de hacía un
instante, era incluso agradable.
Se acostó otra vez, se acordó de su
nuevo asno y pensó que sería del todo feliz a no ser por el dolor de muelas.
Trató de volver a dormirse, pero cinco minutos después el dolor comenzó de
nuevo, más cruel que antes. Ben-Tovit se sentó en la cama y empezó a balancear
el cuerpo acompasadamente. Su rostro adquirió una expresión de sufrimiento, y en
su gran nariz, que había palidecido, apareció una gota de sudor frío.
Así, balanceándose y gimiendo
lastimeramente, permaneció hasta la salida del sol; de aquel sol que estaba
predestinado a ver el Gólgota con sus tres cruces y a eclipsarse de horror y de
tristeza.
Ben-Tovit era un buen hombre, a quien
repugnaba la injusticia; pero cuando su mujer se levantó, le dijo mil cosas
desatentas, lamentándose de que le hubiera dejado solo y no hubiera hecho ningún
caso de sus terribles sufrimientos.
La mujer no se incomodó por estos
reproches injustos; no ignoraba que era el dolor, y en modo alguno la maldad, lo
que hacía hablar así a su marido. Le auxilió, solícita, con no pocos remedios:
una cataplasma, en la mejilla, de estiércol seco y pulverizado; una infusión
muy fuerte de aguardiente y huesos de escorpión; un pedazo de la piedra en que
estaban escritos los diez mandamientos, y que Moisés rompió en su
cólera.
El estiércol aplacó un poco el dolor
de Ben-Tovit, pero por breve tiempo. Los otros remedios produjeron el mismo
efecto y, siempre tras un corto alivio, el dolor volvía a empezar con redoblada
fuerza. Durante los escasos momentos de tregua, Ben-Tovit procuraba olvidarlo
completamente, poniendo el pensamiento en su nuevo asno; pero cuando se hacía
sentir otra vez, empezaba a gemir, a insultar a su mujer y a decir que se iba a
romper la cabeza contra la pared.
Sin cesar iba y venía por el terrado
de su casa, sin acercarse demasiado a la barandilla, para que los transeúntes no
le vieran con la cabeza envuelta en un pañuelo, como una mujer. Con frecuencia,
sus hijos acudían junto a él y referían, interrumpiéndose, algo relativo a Jesús
Nazareno. Ben-Tovit se detenía entonces un instante para escucharlos; pero ponía
luego cara de pocos amigos, hería iracundo el suelo con el pie y echaba a los
niños; aunque era un hombre de buen corazón y aunque amaba a sus hijos, se
enojaba con ellos, lleno de fastidio, al oír aquellas naderías. Le enfadaba
también que la calle y los terrados de las casas vecinas estuvieran llenos de
gente que no hacían nada y le miraban con curiosidad pasearse con la cabeza
envuelta en un pañuelo,…
Quería ya bajar, cuando su mujer le
dijo: -Mira, conducen a los bandidos;
quizá eso te distraiga. -¡Déjame en paz! -respondió colérico
Ben-Tovit-. ¿No ves lo que
sufro?
Pero había en la proposición de su
mujer algo como una promesa vaga de que el dolor de muelas se le aplacaría si
miraba a los bandidos, y se acercó a la barandilla. La cabeza inclinada a un
lado, un ojo cerrado, la mano en la mejilla, miró hacia abajo.
A lo largo de la estrecha calle
empinada marchaba, en completo desorden, una multitud enorme, levantando gran
polvareda. Se oían gritos, centenares de voces mezcladas. En medio de la
multitud, encorvados bajo el peso de las cruces, avanzaban los condenados. Por
encima de sus cabezas, semejantes a serpientes negras, chasqueaban los látigos
de los soldados romanos. Uno de los condenados -el que tenía largos cabellos
rubios y llevaba las vestiduras rotas y ensangrentadas- tropezó en una piedra
que le habían tirado y cayó. Redobló sus gritos la multitud, que parecía un mar
agitado cubriendo con sus olas la superficie de un islote.
Ben-Tovit, de repente, sintió tal dolor, que
se estremeció, como si alguien le hubiera horadado la muela con una
aguja. Lanzó un gemido lastimero y se apartó de la barandilla,
encolerizadísimo, importándole un bledo cuanto sucedía en la calle. -¡Dios
mío, cómo gritan! -gruñó, imaginándose las bocas muy abiertas, con las
muelas no atormentadas por el dolor.
-Cuentan que curaba a los ciegos
-dijo su mujer, que no se apartaba de la barandilla ni dejaba de mirar abajo. Y
tiró una piedrecita al sitio por donde pasaba Jesús, que avanzaba lentamente,
medio muerto ya a latigazos.
-¡Tonterías! -respondió
Ben-Tovit con acento burlón-. ¡Si
posee, en efecto, el don de curar, que me cure a mí el dolor de
muelas! Y tras un corto silencio añadió: -¡Dios mío, qué polvareda
han levantado! ¡Ni que fueran un rebaño! Debían de echarlos a palos.
¡Llévame abajo, Sara!
Su mujer tenía razón. El espectáculo le había distraído un poco, o
quizá el estiércol pulverizado le había aliviado. El caso es que no
tardó en dormirse. Cuando se despertó, el dolor había desaparecido casi por
completo; sólo el lado derecho de la mandíbula parecía ligeramente
hinchado; tan ligeramente, que apenas se notaba. Al menos, así lo
aseguraba su mujer. Ben-Tovit, escuchándola, sonreía maliciosamente; bien sabía
que a su mujer, por su bondad de corazón, le gustaba decir cosas
agradables.
Un rato después llegó su vecino, el
peletero Samuel. Ben-Tovit le enseñó su nuevo asno, y, lleno de orgullo, escuchó
los plácemes de Samuel a propósito del cuadrúpedo.
Después, a ruegos de Sara, que era
muy curiosa, se dirigieron los tres al Gólgota, a ver a los crucificados. Por
el camino, Ben-Tovit refirió a Samuel, sin omitir detalles, cómo había tenido
dolor de muelas, cómo sintió al principio la molestia en el lado derecho de la
mandíbula, cómo se había despertado al amanecer, atacado, súbitamente, de un
dolor insoportable. Para dar una idea más exacta de sus sufrimientos, hacía
muecas, cerraba los ojos, balanceaba la cabeza y gemía. Su vecino asentía
compasivamente, acariciando su larga barba blanca, y decía: -¡Dios mío!
¡Es terrible!
A Ben-Tovit le complacía observar que
Samuel apreciaba toda la intensidad de sus sufrimientos recientes. Refirió por
segunda vez cuanto le había sucedido. Después recordó que hacía ya mucho tiempo
había tenido un dolor de muelas, pero en el lado izquierdo de la mandíbula
inferior.
Así, en conversación animada,
subieron al Gólgota. El sol, condenado a alumbrar el mundo durante aquel día
terrible, se había ya ocultado tras las colinas lejanas. En el firmamento, hacia
el Oeste, llameaba, semejante a un rastro de sangre, una ancha banda roja. Sobre
el fondo del cielo se destacaban vagamente las cruces. Al pie de la de en medio
podían distinguirse siluetas humanas prosternadas.
La multitud se había ido hacía
tiempo. Comenzaba a sentirse frío.
Después de dirigir una mirada
distraída a los crucificados, Ben-Tovit cogió a Samuel del brazo, y los tres se
encaminaron a la casa. Ben-Tovit
experimentaba un deseo violento de seguir hablando, y comenzó de nuevo a hablar
del dolor que había tenido. Así, charlando, caminaban Gólgota
abajo. Animado por las exclamaciones de compasión que profería de vez en cuando
su vecino, daba a su rostro una expresión de sufrimiento, cerraba los ojos,
balanceaba la cabeza, gemía, mientras de las profundas simas de la montaña y de
las llanuras lejanas ascendía la obscura noche, que parecía deseosa de ocultar
al cielo el gran crimen que se acababa de cometer sobre la tierra.
LAS RECETAS DE LA
ABUELA.
La cocina rusa deriva de una
riqueza innumerable de platos, debido en primer lugar al carácter multicultural y en segundo a
la vasta extensión geográfica del país. Sus fundamentos gastronómicos se
asientan en la comida campesina de las poblaciones rurales ubicadas en lugares
caracterizados por un clima extremadamente frío. En esta gastronomía existe la
abundancia de pescado (Generalmente
ahumado), aves de corral,
gamo, setas, frutas del bosque y miel. Abundantes copos de
centeno, trigo, cebada y mijo, todos ellos muy
empleados en una abundante variedad de panes, las crepas, los cereales, el kvas, la cerveza, y el muy afamado
vodka. Son muy abundantes las
diferentes formas de sopas y potajes con diversos aromas y
sabores, todos ellos elaborados con carnes y pescados. En la gastronomía de
Rusia hay elementos de la cocina francesa, así como de los países del antiguo
Imperio Ruso y de otros pueblos de Rusia…
La sopa más típica es Shchi (Щи), hecha de patata,
col (que puede ser reemplazada por chucrut o acedera) y carne. La sopa típica
ucraniana, llamada Borsch
(Борщ) es similar al Shchi con la
principal diferencia de llevar remolacha, y es muy popular en Rusia.
También no menos popular es la sopa Solianka o la Ujá (sopa de pescado). En
Rusia, a diferencia de España donde las sopas calientes se comen en invierno,
las sopas se comen todo el año. En verano se añaden las sopas frías
("Borsch frío", "Okroshka"). En las casas rusas, se considera que es saludable
comer sopa todos los días como el primer plato de la comida.
Sopa rusa Shchi.
Ingredientes:
½ kg ≈ 1 lb de carne de vaca
(costillar).
100 gramos de jamón.
½ kg de col agria (aderezada en salmuera.
100 gramos de crema agria.
1 zanahoria.
1 manojo de perejil.
2 cebollas.
1 o 2 papas.
3 hojas de laurel.
4 dientes de ajo.
1 cucharada de hinojo.
8 granos de pimienta negra.
100 gramos de jamón.
½ kg de col agria (aderezada en salmuera.
100 gramos de crema agria.
1 zanahoria.
1 manojo de perejil.
2 cebollas.
1 o 2 papas.
3 hojas de laurel.
4 dientes de ajo.
1 cucharada de hinojo.
8 granos de pimienta negra.
Preparación:
1.-Poner a cocer la
carne y el jamón con bastante agua, añadir una cebolla, papas enteras y cocer
durante 1½ hora hasta que la carne esté un poco cocida. Sacar las papas, antes que se desbaraten.
2.-Agregar la col
mezclada con sal, la cebolla picada, el perejil picado y seguir cociendo una hora.
3.-Se sazonan con todos
los ingredientes restantes diez minutos antes del fin de la
preparación. ¡Y ya está!,
fácil y sabrosa.
DEL HOGAR Y ALGO
MÁS…
Ñame (del
fulani, nyami, comer)
(1) es el nombre dado a
un grupo de plantas con tubérculos comestibles del género Dioscorea.
El verdadero ñame es una
planta trepadora oriunda a las zonas cálidas y húmedas, que se cultiva por su
tubérculo comestible desde hace miles de años, sobre todo en
África, en Asia del Sur y en las islas
del Pacifico. Se prepara de
maneras muy variadas, asado, al horno, frito, en puré, sopas y potajes o
ahumado. Se puede emplear también como ingrediente de algunos postres. Es el
alimento principal de ciertos pueblos, tales como los Igbo de Nigeria.
La principal producción de ñame se
localiza en África del Oeste. Los
tubérculos de algunas variedades se
pueden almacenar durante más de seis meses sin refrigeración, lo que les
hace muy valiosos para la población local.
El tubérculo puede alcanzar 1,5
metros y pesar hasta 70 kilogramos con un diámetro de casi 15 centímetros. Su
piel es áspera y de color marrón a gris rosado, difícil de pelar, aunque la cocción facilita
esta etapa. El interior es de color blanco y rico en almidón.
El nombre "ñame" se utiliza también,
sobre todo en las islas Canarias, (España), Cuba para Colocasia esculenta,
conocida en otros lugares como "taro" o "aro. [Los campesinos cubanos suelen
sembrar el ñame en un hueco de un metro o más, redondo, que rellenan con hojas
de plátano o similares, sembrando el ñame dentro. Esto permite obtener un
tubérculo mucho mayor.]
Fuente y foto:
wikipediaYamsatBrixtonMarket.jpg
Nota: el ñame, como
otros tubérculos, no tiene sabor destacado, absorbe el del sofrito o mojo.
INFORMACIONES ÚTILES
PARA MEJORAR NUESTRA SALUD:
El alcohol puede ser un invitado riesgoso en las fiestas de
fin de año No presione a los invitados
para que beban y asegúrese de que los que beban tengan un conductor designado
que no lo haga.
¿Bebedores regulares, latido cardiaco
irregular? Incluso unas cantidades
moderadas de alcohol podrían contribuir a la fibrilación auricular, sugiere un
estudio.
Las dietas ricas en carnes podrían aumentar los riesgos
cardiacos de las mujeres mayores Las
fuentes vegetales de proteínas parecen ser más seguras, sugiere un
estudio.
Campaña de salud pública reduce consumo de bebidas
azucaradas Las ventas de
refrescos se redujeron un 20% en un condado de Maryland, encuentra un
estudio.
¿Limpiando su casa? No se olvide del
refrigerador Fuente:
Departamento de Agricultura, Servicio de Inocuidad e Inspección de los
Alimentos. Los vínculos son de HealthDay, si no se especifica otra
fuente.
POESÍA.
Don Miguel de Unamuno y Jugo (1) (1,864-, †1,936) fue un escritor y filósofo español perteneciente a la generación del 98. En su obra cultivó gran variedad de géneros literarios como novela, ensayo, teatro y poesía. Fue, asimismo, diputado en Cortes de 1,931 a 1,933 por Salamanca. (1) Nombrado rector de la Universidad de Salamanca tres veces; la primera vez en 1,900 (2) y la última, desde 1,931 hasta su destitución, el 22 de octubre de 1,936, por orden de Franco. (3) Recomendamos la lectura de la respuesta de Don Miguel a los fascistas, en el vínculo siguiente:
Don Miguel de Unamuno y Jugo (1) (1,864-, †1,936) fue un escritor y filósofo español perteneciente a la generación del 98. En su obra cultivó gran variedad de géneros literarios como novela, ensayo, teatro y poesía. Fue, asimismo, diputado en Cortes de 1,931 a 1,933 por Salamanca. (1) Nombrado rector de la Universidad de Salamanca tres veces; la primera vez en 1,900 (2) y la última, desde 1,931 hasta su destitución, el 22 de octubre de 1,936, por orden de Franco. (3) Recomendamos la lectura de la respuesta de Don Miguel a los fascistas, en el vínculo siguiente:
A un hijo de españoles
A un hijo de españoles
arropamos
hoy en tierra francesa; el inocente
se apagó-¡feliz él!-sin que su mente
se abriese al mundo en que muriendo vamos.
hoy en tierra francesa; el inocente
se apagó-¡feliz él!-sin que su mente
se abriese al mundo en que muriendo vamos.
A la pobre cajita sendos
ramos
echamos de azucenas -el relente
llora sobre su huesa-, y al presente
de nuestra patria el pecho retornamos.
echamos de azucenas -el relente
llora sobre su huesa-, y al presente
de nuestra patria el pecho retornamos.
“Ante la vida cruel que le
acechaba,
mejor que se me muera”-nos decía
su pobre padre, y con la voz temblaba;
mejor que se me muera”-nos decía
su pobre padre, y con la voz temblaba;
era de otoño y bruma el triste
día
y creí que enterramos-¡Dios callaba!-
tu porvenir sin luz, ¡España mía!
tu porvenir sin luz, ¡España mía!
Microbiografía de: es.wikipedia.org;
poema de ciudadseva.com
PARA
REFRESCAR.
Nos proponemos ofrecerle curiosidades sobre grandes músicos, en forma
breve. Esperamos que sea de su agrado. Al final, los habituales
chistes.
Curiosidades de Johann
Sebastián Bach:
Bach. Despreciado por la
Nobleza: nunca fue considerado merecidamente en su época. Los seis
conciertos de Brandemburgo los escribió para dedicárselos al Margrave de la
corte de esta ciudad alemana. Cuando el gachó (el Marqués) los recibió,
sin dar las gracias, los metió en un cajón polvoriento. Menos mal que alguien se
ocupó antes de sacar una copia, y algunos de ellos fueron estrenados en vida del
autor. Foto: biografíasyvidas.
Bach el Campeón: tuvo 7 hijos con su primera esposa y 13 con la
segunda. Total: 20 pequeñines, de los cuales algunos fueron famosos
músicos.
Bach para dormir: En la
época de Bach había un conde que tenía problemas de insomnio. El médico le
aconsejó que antes de dormir, escuchara música relajante, así que contrató a
Bach para que le escribiera una obra lo suficientemente larga como para
dormirlo. Tras ser escrita (una obra para clave, el predecesor del piano), el
clavecinista de la corte cada noche la tocaba en una habitación cercana al
dormitorio del insomne, consiguiendo los efectos deseados. Y esa obra se llama en honor al apellido de tal
clavecinista, “Las Variaciones Goldberg”.
Bach te deja sin aire:
En el estreno de una obra suya al aire libre, un trompetista murió durante
el desarrollo del concierto. Después de lo que parecía un simple
desvanecimiento, cuentan que en su lecho de muerte sus últimas palabras fueron:
“Este Bach, ha conseguido acabar
conmigo…” (Esta anécdota ha sido recogida del programa de R.N.E.
“Clásicos Populares”).
Bach y el Jazz: Hay
actualmente reconocidos músicos que investigan de una forma muy especial y seria
a Bach. Comparan sus obras con las de
jazz, ya que basta una simple modificación en el ritmo de algunas de sus obras
para convertirlas en auténticas piezas de esta forma musical.
Dicen, incluso, que Bach fue el primer músico en adelantarse a esta forma de
composición.
Bach murió ciego: A lo
largo de su vida sufrió varias operaciones en los ojos, ya que su vista siempre
fue muy delicada. De hecho, unos días antes de morir, cuando estaba
totalmente ciego, despertó con una notable mejoría recuperando parte de la
visión. Entonces compuso su última
cantata donde el coro da gracias al Señor de una forma muy
solemne,…
Y además: Cuando Bach
era un niño su padre le formó musicalmente, aunque le prohibía estudiar por
su cuenta las partituras de renombrados compositores italianos de la época
(Vivaldi) para no deformar su aprendizaje, escondiéndolas en un armario con
llave. De noche, Bach se levantaba, las robaba introduciendo palos por las
rendijas, y a la luz de una vela o probablemente de la luna, las copiaba nota
por nota para poder dejarlas en su sitio cuanto antes, y estudiarlas cuando a él
le apeteciera. Obviamente esto no contribuyó a mejorar su
visión.
Federico el Grande sí que lo
apreció: Este rey amante de la música invitó a Bach a su corte para que el
compositor viera como tocaba un tema en un clavicordio. Entonces le dijo:
“Hágame una muestra de su habilidad, e improvise una obra sobre el tema que
he tocado”. Bach no sólo improvisó
sobre el tema, si no que compuso mientras tocaba una fuga a 6 voces que aún deja
boquiabiertos a los oyentes. El rey quedó tan impresionado, que meses
después recibió un manuscrito limpio en el que Bach le ofreció dedicada toda una
obra centrada en el tema que tocaron y en las fugas improvisadas, “La Ofrenda
Musical, B.W.V. 1079″. Fuente y foto:
Taringa.net
Para
reír:
Lo perdido: El marido
llega al portal de su casa totalmente borracho y empieza a gritar: -¡Mariiiiia,
Mariiiia! La mujer se asoma a la ventana y dice: -Ya vienes otro día borracho y
quieres que te eche la llave. -No, no,
si hoy la llave la tengo, mejor tírame la cerradura, que no la
encuentro.
Ley de extranjería
flexible: Si Donald Trump quiere echar a todos los extranjeros de EE.UU.,
¿por qué sigue contratando a extranjeras
para ser su esposa?
Respuesta de teléfono
automático: - Camarero, camarero, ¿me aliña la ensalada? - Con el uno el pepino, con el dos el
tomate, con el tres la
cebolla...
Pasado, presente: La
maestra le pregunta a Jaimito: -Si yo digo fui rica, es tiempo pasado,
pero si digo soy hermosa, ¿qué es? -Exceso de imaginación. Chistes de 1,000chistes.com
Con la música de fondo de “Only
you”, ríase un rato. Colaboración de Ángels T. http://www.youtube-nocookie.com/embed/ItXKGyO6cRA?rel=0
Si este
blog ha sido de su agrado recomiéndelo a sus amigos. Gracias. Yskra y
Romel.
Próxima
edición: 16 o 17 de febrero.
El blog http://www.mangoconarrozdos.blogspot.com.es se hace sin ánimo de lucro. No percibimos
ingresos por él. Sólo lo creamos para intentar brindarle información y
entretenimiento, del cual disfrutamos los Editores. Por razones de espacio
algunos textos han sido resumidos. Si desea leer completo el tema, debe ir al
vínculo al pie del texto. Han sido preservados los datos esenciales. Salvo que
se especifique lo contrario, las negritas, itálicas, y
subrayados son del Editor. El sentido de (…) y de… es indicar que se ha
condensado el original. Los comentarios entre [ ] son del Editor. Nuestros blogs
son posibles por los servicios gratuitos de diferentes empresas internacionales
de comunicación y los Alertas de Google. Gracias.
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