Este escritor danés ha pasado a la posteridad por una literatura que no apreciaba mucho: los cuentos “infantiles”. Escribir cuentos cortos es difícil, más que hacer una novela de 500 pliegos. Con el añadido que, aunque está destinada para niños, realmente los disfrutan y leen los que han dejado de serlo hace muchos años.
Generalmente los cuentos infantiles de todos los países recogen las tradiciones orales de los campesinos, de la gente más humilde que durante el invierno o en sus horas de descanso nocturno, las llenaban de narraciones más o menos fantásticas e imaginarias.
Los Hermanos Grimm, de los que pronto les traeremos un cuento, son totalmente diferentes a Hans Christian en su formación, desarrollo y proyección. Incluso sus narraciones originales poco tienen que ver con “cuentos infantiles”, pues recogen crudamente las maldades y crueldades de la época en que fueron imaginados. Además, contribuyeron a fundar y establecer las normas lingüísticas de la lengua germana actual. Pero esa es otra historia, por demás interesante, que les haremos en otro momento.
Lean esta breve biografía de: “Hans Christian Andersen, autor y poeta danés, destacó especialmente por sus cuentos. Entre sus obras hay que reseñar además sus libros de viaje y alguna novela”. Fuente: rinconcastellano.com
Abuelita es muy vieja, tiene muchas arrugas y el pelo completamente blanco, pero sus ojos brillan como estrellas, sólo que mucho más hermosos, pues su expresión es dulce, y da gusto mirarlos. También sabe cuentos maravillosos y tiene un vestido de flores grandes, grandes, de una seda tan tupida que cruje cuando anda. Abuelita sabe muchas, muchísimas cosas, pues vivía ya mucho antes que papá y mamá, esto nadie lo duda.
Tiene un libro de cánticos con recias cantoneras de plata; lo lee con gran frecuencia. En medio del libro hay una rosa, comprimida y seca, y, sin embargo, la mira con una sonrisa de arrobamiento, y le asoman lágrimas a los ojos. ¿Por qué abuelita mirará así la marchita rosa de su devocionario? ¿No lo sabes? Cada vez que las lágrimas de la abuelita caen sobre la flor, los colores cobran vida, la rosa se hincha y toda la sala se impregna de su aroma; se esfuman las paredes cual si fuesen pura niebla, y en derredor se levanta el bosque, espléndido y verde, con los rayos del sol filtrándose entre el follaje, y abuelita vuelve a ser joven, una bella muchacha de rubias trenzas y redondas mejillas coloradas, elegante y graciosa; no hay rosa más lozana, pero sus ojos, sus ojos dulces y cuajados de dicha, siguen siendo los ojos de abuelita.
Sentado junto a ella hay un hombre, joven, vigoroso, apuesto. Huele la rosa y ella sonríe - ¡pero ya no es la sonrisa de abuelita! - sí, y vuelve a sonreír. Ahora se ha marchado él, y por la mente de ella desfilan muchos pensamientos y muchas figuras; el hombre gallardo ya no está, la rosa yace en el libro de cánticos, y... abuelita vuelve a ser la anciana que contempla la rosa marchita guardada en el libro.
Ahora abuelita se ha muerto. Sentada en su silla de brazos, estaba contando una larga y maravillosa historia.
-Se ha terminado -dijo- y yo estoy muy cansada; dejadme echar un sueñito.
Se recostó respirando suavemente, y quedó dormida; pero el silencio se volvía más y más profundo, y en su rostro se reflejaban la felicidad y la paz; se habría dicho que lo bañaba el sol... y entonces dijeron que estaba muerta.
La pusieron en el negro ataúd, envuelta en lienzos blancos. ¡Estaba tan hermosa, a pesar de tener cerrados los ojos! Pero todas las arrugas habían desaparecido, y en su boca se dibujaba una sonrisa. El cabello era blanco como plata y venerable, y no daba miedo mirar a la muerta. Era siempre la abuelita, tan buena y tan querida. Colocaron el libro de cánticos bajo su cabeza, pues ella lo había pedido así, con la rosa entre las páginas. Y así enterraron a abuelita.
En la sepultura, junto a la pared del cementerio, plantaron un rosal que floreció espléndidamente, y los ruiseñores acudían a cantar allí, y desde la iglesia el órgano desgranaba las bellas canciones que estaban escritas en el libro colocado bajo la cabeza de la difunta. La luna enviaba sus rayos a la tumba, pero la muerta no estaba allí; los niños podían ir por la noche sin temor a coger una rosa de la tapia del cementerio. Los muertos saben mucho más de cuanto sabemos todos los vivos; saben el miedo, el miedo horrible que nos causarían si volviesen. Pero son mejores que todos nosotros, y por eso no vuelven. Hay tierra sobre el féretro, y tierra dentro de él.
El libro de cánticos, con todas sus hojas, es polvo, y la rosa, con todos sus recuerdos, se ha convertido en polvo también. Pero encima siguen floreciendo nuevas rosas y cantando los ruiseñores, y enviando el órgano sus melodías. Y uno piensa muy a menudo en la abuelita, y la ve con sus ojos dulces, eternamente jóvenes. Los ojos no mueren nunca. Los nuestros verán a abuelita, joven y hermosa como antaño, cuando besó por vez primera la rosa, roja y lozana, que yace ahora en la tumba convertida en polvo.
LAS RECETAS DE LA ABUELA.
Ingredientes:
1 kg. (2 libras) de patatas.
6 huevos.
2 latas de bonito o atún en aceite.
2 zanahorias.
1 bote pequeño de aceitunas, o 10 aceitunas sin hueso.
1/2 limón.
1/2 vaso de 8 onzas de aceite de girasol.
1 lata pequeña de pimiento rojo o un pimiento grande cocinado.
Conocida también como ensalada Olivier es un plato típico de Rusia. ... muy popular en muchos países europeos, tanto que ha sido incluido en sus gastronomías nacionales, como en el caso de España.
Procedimiento:
Poner en una cazuela con agua y sal las patatas y las zanahorias a cocer. En otro cazo[1] con agua poner 4 huevos a cocer, que necesitarán unos 15 minutos. Una vez todo cocido, pelar las patatas, zanahorias y huevos. Mientras se cuece todo, hacer una mayonesa con los dos huevos restantes, colocando primero los huevos, después el aceite y por último el zumo de medio limón. Batirlo todo con una batidora de aspas, teniendo cuidado de no levantarla hasta que pasen dos minutos, para evitar que se corte. Si no estáis muy seguros de que no se os corte, se puede usar mayonesa ya hecha, aunque el sabor es más agradable con la casera.
Una vez peladas las patatas, las zanahorias y los huevos, partir todo en cuadraditos, menos un huevo, que dejaremos para adornar. Poner todo en una fuente, añadiendo el bonito o el atún desmenuzado y parte de las aceitunas. Añadir la mayonesa, revolviendo para que se mezclen todos los ingredientes.
Colocar la ensaladilla en una fuente plana, extendiendo una capa ligera de mayonesa y rallar el huevo duro que hemos dejado sin picar por encima de la ensalada, decorando la fuente con las aceitunas y el pimiento rojo en tiritas. Guardar en el frigorífico para tomarla un poco fría. Conviene hacerla una o dos horas antes de consumirla.
Consejo práctico: si se usa la mayonesa casera, no debe dejarse para el día siguiente, pues se puede estropear. La prefiero tanto por el sabor como por no tener aditivos ni conservantes.
¡Ya está lista para disfrutar de ella, cuando esté un poco fría!
DE MEDICINA, EL HOGAR Y ALGO MÁS…
(Foto de complotsymisterios.com.ar)
¿Qué causa la combustión espontánea humana? Cada semana, la revista BBC Focus resuelve algunas dudas de sus lectores. A continuación, una selección de algunas de las respuestas para los curiosos.
Se le llama combustión espontánea humana porque la víctima termina convertida en cenizas, sin que haya mucho daño causado por el fuego en las cercanías ni una fuente obvia de encendido.
Es muy rara y las víctimas usualmente son ancianas y viven solas. Muchos asumen que sólo fuerzas súper naturales o exóticas pueden explicar la razón para que, por ejemplo, se encuentre a menudo una pierna sin quemaduras, mientras que el resto del cuerpo está completamente quemado.
Pero lo más probable es que se trate de un proceso más aterrizado[2] conocido como el “efecto mecha”.
La víctima primero se muere de un ataque al corazón, un derrame o una caída. Un cigarrillo prendido o una chispa de algún fuego cercano hacen que su ropa arda sin llama. Mientras la ropa se va quemando lentamente, el calor derrite la grasa que está debajo de la piel y la tela carbonizada la absorbe como una mecha y la quema.
Experimentos llevados a cabo con cadáveres de cerdos envueltos en cobijas han mostrado que arde con una llama suave y estable que calienta el cuerpo a 800ºC y dura por siete o más horas.
Las partes del cuerpo que están desnudas pueden quedar sin quemarse pero el resto del cuerpo queda completamente incinerado.
¿Por qué no hay comida azul? Azul es un pigmento difícil de hacer en la Naturaleza. Los colores azules están asociados con química alcalina y la mayoría de las plantas y animales tienen un metabolismo ligeramente ácido.
Unas pocas plantas que tienen flores azules confinan el pigmento a los pétalos y a menudo se tornan violetas o rosas en diferentes épocas o en suelos ácidos.
La coloración azul en animales se consigue con escamas diminutas que dispersan la luz hacia la parte azul del espectro (iridiscencia) más que con un pigmento.
Debido a que el azul sea tan escaso en la naturaleza, hemos evolucionado de manera que lo encontramos poco apetecible y hay una presión selectiva que favorece a las frutas rojas. Hay gallinas que ponen huevos azules... (Esto debe estar asociado con su alimentación).
¿Cuántos humanos han vivido? Es difícil ser muy preciso pues no podemos siquiera calcular en qué milenio emergió nuestra especie y no tenemos buenos registros históricos de nacimientos y expectativa de vida.
Pero la mayoría de los estimados modernos se ubican entre 100 y 115 mil millones de personas. Eso es mucho más de lo que se pensaba en los años 70, cuando se calculaba que en toda la historia habían vivido 6.000 millones de personas.
¿Por qué nos tapamos la boca cuando estamos aterrados? Cuando uno está realmente aterrado no se tapa la boca: sencillamente grita.
Taparse la boca parece ser una reacción secundaria, que se hace para tratar de moderar la respuesta inicial. Eso puede ser porque uno se da cuenta de que no está en peligro o porque no quiere alarmar a los demás.
Probablemente se desarrolló para evitar que cundiera el pánico en grupos.
(Foto de ueom.com) ¿Se puede ganar apostándole siempre a los favoritos? Parece obvio que un caballo o un equipo de fútbol considerado favorito tienen más oportunidades de ganar, así que vale la pena apostarle.
Lo malo es que los favoritos no siempre ganan. De hecho, en las 144.000 carreras de caballo que hubo en el Reino Unido entre 1991 y 2010, el favorito ganó sólo el 34% de ellas.
Eso no sería un problema si lo que se ofrece es suficiente para compensar las pérdidas pero, a largo plazo, no lo es. Si uno hubiera apostado un dólar por cada favorito durante esos 20 años, habría perdido unos US$12.000.
POESÍA…
“Miguel de Unamuno y Jugo. (1864 –1936) fue un escritor y filósofo español perteneciente a la generación del 98. En su obra cultivó gran variedad de géneros literarios como novela, ensayo, teatro y poesía”.
Excede, con mucho, las posibilidades de este blog, recoger una biografía como la de Wikipedia, sobre la vida de este Hombre ejemplar. También sería injusto hacerlo en dos líneas porque, además, algunos de sus planteamientos siguen siendo actuales. Por ello, aunque hayamos condensado la completa y excelente de Wikipedia, le hemos dedicado todo el espacio que nos ha sido posible como una forma de recordar y rendir modestamente honor a quien supo ser creyente y demócrata, republicano y honesto, intelectual y humano. Consecuente con su vida y obra en las más difíciles condiciones personales e intelectuales que una persona pueda afrontar y salir airoso, con la cabeza en alto y el honor sin mácula, de ella. Sin más, recogemos aspectos destacados de este español eterno mientras exista España, recomendándoles vayan a la fuente donde encontraran grandes enseñanzas.
“Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Madrid, obteniendo la calificación de notable en 1883, a sus veintiún años. Al año siguiente se doctora con una tesis sobre la lengua vasca: Crítica del problema sobre el origen y prehistoria de la raza vasca. En ella anticipa su idea sobre el origen de los vascos, idea contraria a la que en los años venideros irá gestando el nacionalismo vasco, recién fundado por los hermanos Arana Goiri, que propugnará una raza vasca no contaminada por otras razas.
Polemizó con Arana, que iniciaba su actividad nacionalista, ya que consideraba a Unamuno como vasco pero ”españolista” debido a que Unamuno, que ya había escrito algunas obras en euskera, consideraba que ese idioma estaba próximo a desaparecer y que el bilingüismo no era posible. ”El vascuence y el castellano son incompatibles dígase lo que se quiera, y si caben individuos no caben pueblos bilingües. Es éste de la bilingüidad un estado transitorio”.
En (...) 1894 ingresa en la Agrupación Socialista de Bilbao y colabora en el semanario Lucha de clases de esta ciudad, abandonando el partido socialista en 1897 y sufriendo una gran depresión.
En 1901 fue nombrado Rector de la Universidad de Salamanca, por primera vez, cargo que llegó a ostentar por 3 veces. En 1914 el ministro de Instrucción Pública lo destituye del rectorado por razones políticas, convirtiéndose Unamuno en mártir de la oposición liberal. (...). Es condenado a dieciséis años de prisión por injurias al Rey, pero la sentencia no llegó a cumplirse. (...). Sus constantes ataques al rey y al dictador Primo de Rivera hacen que éste lo destituya nuevamente y lo destierre (en) 1924. (Sufre destierro...) hasta el año 1930, año en el que cae el régimen de Primo de Rivera. A su vuelta a Salamanca, entró en la ciudad con un recibimiento apoteósico.
Unamuno proclama el 14 de abril la República en Salamanca. Desde el balcón del ayuntamiento, el filósofo declara que comienza “una nueva era y termina una dinastía que nos ha empobrecido, envilecido y entontecido”.
Sin embargo, el escritor e intelectual, que en 1931 había dicho que él había contribuido más que ningún otro español —con su pluma, con su oposición al rey y al dictador, con su exilio...— al advenimiento de la República, empieza a desencantarse.
En 1935 es nombrado ciudadano de honor de la República. Fruto de su desencanto, expresa públicamente sus críticas a la reforma agraria, la política religiosa, la clase política, el gobierno, Azaña.
Al iniciarse la guerra civil, apoyó inicialmente a los rebeldes. Sin embargo, el entusiasmo por la sublevación pronto se torna en desengaño, especialmente ante el cariz que toma la represión en Salamanca. En sus bolsillos se amontonan las cartas de mujeres de amigos, conocidos y desconocidos, que le piden que interceda por sus maridos encarcelados, torturados y fusilados.
Unamuno se arrepintió públicamente de su apoyo a la sublevación. Durante el acto de apertura del curso académico (que coincidía con la celebración de la Fiesta de la Raza), el 12 de octubre de 1936, en el Paraninfo de la Universidad varios oradores soltaron tópicos acerca de la «anti-España». Lo que sucedió, según cuenta en su magna obra La guerra civil española el hispanista inglés Hugh Thomas, es lo siguiente: el profesor Francisco Maldonado, tras las formalidades iniciales y un apasionado discurso de José María Pemán, pronuncia un discurso en que ataca violentamente a Cataluña y al País Vasco, calificando a estas regiones como ”cánceres en el cuerpo de la nación. El fascismo, que es el sanador de España, sabrá como exterminarlas, cortando en la carne viva, como un decidido cirujano libre de falsos sentimentalismos”.
(...) Un indignado Unamuno (presidía el acto como rector de la Universidad), que había estado tomando apuntes sin intención de hablar, se puso de pie y pronunció un apasionado discurso:”Estáis esperando mis palabras. Me conocéis bien, y sabéis que soy incapaz de permanecer en silencio. A veces, quedarse callado equivale a mentir, porque el silencio puede ser interpretado como aquiescencia. Quiero hacer algunos comentarios al discurso -por llamarlo de algún modo- del profesor Maldonado, que se encuentra entre nosotros. Se ha hablado aquí de guerra internacional en defensa de la civilización cristiana; yo mismo lo hice otras veces. Pero no, la nuestra es sólo una guerra incivil. Vencer no es convencer, y hay que convencer, sobre todo, y no puede convencer el odio que no deja lugar para la compasión. Dejaré de lado la ofensa personal que supone su repentina explosión contra vascos y catalanes llamándolos anti-España; pues bien, con la misma razón pueden ellos decir lo mismo. El señor obispo lo quiera o no lo quiera, es catalán, nacido en Barcelona, y aquí está para enseñar la doctrina cristiana que no queréis conocer. Yo mismo, como sabéis, nací en Bilbao y llevo toda mi vida enseñando la lengua española, que no sabéis...»
En este punto, el general José Millán-Astray (el cual sentía una profunda enemistad por Unamuno), empezó a gritar:” ¿Puedo hablar? ¿Puedo hablar?”. Su escolta presentó armas y alguien del público gritó:” ¡Viva la muerte!” (Lema de la Legión). Millán habló:” ¡Cataluña y el País Vasco, el País Vasco y Cataluña, son dos cánceres en el cuerpo de la nación! ¡El fascismo, remedio de España, viene a exterminarlos, cortando en la carne viva y sana como un frío bisturí!” (...) Se produjo un silencio mortal y unas miradas angustiadas se volvieron hacia Unamuno, que dijo:” Acabo de oír el necrófilo e insensato grito "¡Viva la muerte!". Esto me suena lo mismo que "¡Muera la vida!". Y yo, que he pasado mi vida componiendo paradojas que excitaban la ira de algunos que no las comprendían he de deciros, como experto en la materia, que esta ridícula paradoja me parece repelente. Como ha sido proclamada en homenaje al último orador, entiendo que va dirigida a él, si bien de una forma excesiva y tortuosa, como testimonio de que él mismo es un símbolo de la muerte. El general Millán-Astray es un inválido. No es preciso que digamos esto con un tono más bajo. Es un inválido de guerra. También lo fue Cervantes. Pero los extremos no sirven como norma. Desgraciadamente en España hay actualmente demasiados mutilados. Y, si Dios no nos ayuda, pronto habrá muchísimos más. Me atormenta el pensar que el general Millán-Astray pudiera dictar las normas de la psicología de las masas. Un mutilado que carezca de la grandeza espiritual de Cervantes, que era un hombre, no un superhombre, viril y completo a pesar de sus mutilaciones, un inválido, como he dicho, que no tenga esta superioridad de espíritu es de esperar que encuentre un terrible alivio viendo cómo se multiplican los mutilados a su alrededor. El general Millán Astray desea crear una España nueva, creación negativa sin duda, según su propia imagen. Y por eso quisiera una España mutilada (...)”.
(...) Unamuno, sin amedrentarse, continúa:” ¡Éste es el templo de la inteligencia, y yo soy su sumo sacerdote! Vosotros estáis profanando su sagrado recinto. Yo siempre he sido, diga lo que diga el proverbio, un profeta en mi propio país. Venceréis, porque tenéis sobrada fuerza bruta. Pero no convenceréis, porque para convencer hay que persuadir. Y para persuadir necesitaréis algo que os falta: razón y derecho en la lucha. Me parece inútil el pediros que penséis en España. He dicho”.
A continuación, con el público asistente encolerizado contra Unamuno y lanzándole todo tipo de insultos, algunos oficiales echaron mano de las pistolas... pero se libró gracias a la intervención de Carmen Polo de Franco, quien agarrándose a su brazo lo acompañó hasta su domicilio. Ese mismo día, la corporación municipal se reunió de forma secreta y expulsó a Unamuno.
Los últimos días de vida (de octubre a diciembre de 1936) los pasó bajo arresto domiciliario en su casa, en un estado, en palabras de Fernando García de Cortázar, de resignada desolación, desesperación y soledad.”
De este gran español, les ofrecemos su poema:
A UN HIJO DE ESPAÑOLES.
A un hijo de españoles arropamos
hoy en tierra francesa; el inocente
se apagó-¡feliz él!-sin que su mente
se abriese al mundo en que muriendo vamos.
A la pobre cajita sendos ramos
echamos de azucenas-el relente
llora sobre su huesa-, y al presente
de nuestra patria el pecho retornamos.
"Ante la vida cruel que le acechaba,
mejor que se me muera"-nos decía
su pobre padre, y con la voz temblaba;
era de otoño y bruma el triste día
y creí que enterramos-¡Dios callaba!-
tu porvenir sin luz España mía.
(Fuente los-poetas.com)
PARA REFRESCAR…
Fantasía de un robot. (Colaboración de m. false).
Les ofrecemos estos hipervínculos:
Popurrí de boleros. Colaboración de Nelson L.
http://www.youtube.com/watch?v=vEDUecYUvW8&feature=share
Si este blog ha sido de su agrado recomiéndelo a sus amigos. Gracias. Yskra y Romel.
Ayuda al lector: Es aconsejable ampliar el texto con el zoom a 125-150% para facilitar la lectura. Un clic lo lleva a la referencia y otro sobre ella, lo trae de nuevo al texto que leía. Igualmente, si hace clic sobre las imágenes, casi siempre aparecerá, a tamaño original, el material donde fue tomada. Si desea volver al texto, debe hacer clic sobre la flecha superior izquierda de la pantalla. Siempre que nos es posible, preservamos el “vínculo” de origen de los materiales que utilizamos, por respeto al trabajo ajeno y su divulgación.
Fuentes: BBC; D.R.A.E.; Google; es.wikipedia.org/wiki;
Colaboraciones y sugerencias a: soyyskra@facebook.com.
Esta publicación se edita entre lunes y miércoles de cada semana. http://mangoconarroz.blogspot.com entre miércoles y domingo.
Información: Este blog se lee en países donde algunas palabras utilizadas en España no son de uso común. Por ello, explicamos el contenido o la intención de las que pensamos necesarias. El nº delante de la palabra indica la acepción tomada del Diccionario de la Real Academia. Por razones de espacio, algunos textos de las fuentes han sido resumidos. Si desea leer completo el tema, debe ir al original. Han sido preservados los datos esenciales. Salvo que se especifique lo contrario, las negritas, itálicas, y subrayados son de los editores. El sentido de (…) es indicar que se ha consensado el texto original.
[1] cazo: 1. m. Recipiente de cocina, de metal, porcelana, etc., generalmente más ancho por la boca que por el fondo, pero a veces cilíndrico, con mango y, por lo general, un pico para verter.
[2] aterrizado: asumo que quiere decir “terrenal” o “común”, no sobrenatural ni insólito. El DRAE no da una acepción que se corresponda con algo asumible. Tampoco en el diccionario de Sinónimos y Antónimos Gredos. Debe ser un término local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario